La antropóloga teatral Johanna Wahanik visitó la Universidad de Piura, donde compartió su visión sobre la pedagogía experiencial y el teatro como herramientas para el cambio social.
Por Aisa Serrano Caballero. 23 mayo, 2025.“La vida se transforma desde los actos más pequeños”, afirma Johanna Wahanik, especialista en pedagogía experiencial. Su propuesta pedagógica busca despertar la sensibilidad humana y la conciencia social a través del arte, la emoción y la vivencia. Para ella, el aprendizaje auténtico ocurre cuando se involucra el cuerpo, las emociones y la interacción con otros.
La pedagogía experiencial es un enfoque que propone aprender haciendo, sintiendo y reflexionando a partir de vivencias reales o simbólicas. Para la visitante colombiana, esta metodología cobra mayor fuerza cuando se combina con el teatro, una herramienta que permite explorar emociones, imaginar realidades alternativas y construir desde lo colectivo.
“La pedagogía me ha enseñado a vivir la vida desde los actos más pequeños. Y el teatro es un juego que nos ayuda a entender cómo queremos vivirla. Por ejemplo, si preguntamos cómo sería el Piura ideal, con esta metodología hacemos una obra que lo represente. Así, no solo lo soñamos: lo vivimos”, afirma la antropóloga teatral.
Wahanik considera que los grandes cambios sociales no empiezan únicamente en las políticas públicas, sino en cómo estas impactan en lo cotidiano. Por eso, propone que el aula se convierta en un laboratorio de transformación personal y social, donde los estudiantes aprendan desde el cuerpo, las emociones y la interacción con los demás.
“No estoy aprendiendo solo desde la mente, sino desde la experiencia. Estoy dando paso a mi sensibilidad”, señala.
Para implementar este enfoque, Wahanik sostiene que los docentes también deben transformarse. “Primero, el profesor tiene que ser alumno, vivir la experiencia. Luego, alimentar su creatividad, probar nuevas metodologías, y trabajar en comunidad con sus colegas y estudiantes a través de semilleros de investigación”.