21

Dic

2021

Artículo de opinión

Llega el verano, ¡cuidado con los niños!

Ahora que empieza el verano, los niños necesitan jugar y divertirse. Para una mayoría, la pandemia ha significado meses de encierro; otros, han nacido durante este periodo. Es importante que interactúen; pero, tomando las medidas para evitar riesgos innecesarios.

Por Verónica Webb. 21 diciembre, 2021.

Lo primero a considerar es que el COVID no ha desaparecido y los niños todavía no están vacunados contra este. Por tanto, tienen riesgo de contagio. Además, al entrar en contacto con otros niños, estarán expuestos a contraer infecciones respiratorias, como la rinofaringitis; o, alguna Enfermedad Diarreica Aguda (EDA), que aumentan en épocas de verano.

Por otro lado, jugar al aire libre, en parques, principalmente, incrementa el riesgo de accidentes; y, los paseos a la playa hacen aumentar el riesgo de insolación y quemaduras solares.

En este sentido, se deben promover juegos en grupos pequeños, al aire libre; el uso permanente de la mascarilla siempre que el niño la tolere y el lavado frecuente de manos, lo cual no solo los protegerá contra el COVID-19, sino también contra cualquier infección respiratoria o una EDA. Asimismo, se deberá mantener los protocolos establecidos por las autoridades.

Existen síntomas a los que se debe prestar especial atención, como la fiebre, las deposiciones sueltas o líquidas, más si son frecuentes y abundantes, por el riesgo de deshidratación. También, a la disminución o falta de apetito por más de un día, el decaimiento, que suele manifestarse en desánimo para jugar o mayor sueño de lo habitual; y dificultad al respirar. Si hay alguno de estos signos hay que contactar a un médico.

Otras medidas de prevención son: fortalecer la adecuada limpieza de los alimentos, como frutas y verduras; cocerlos bien y evitar consumir los que están expuestos al aire libre por varias horas.

De igual forma, hay que tener cuidado con los golpes de calor en el verano; estos suelen afectar mucho a los niños y adultos mayores, principalmente. Hay que protegerlos con un bloqueador solar cuando realicen actividades al aire libre; propiciar una ingesta constante de agua para evitar cuadros de deshidratación, y no abrigarlos de manera innecesaria.

También, son comunes las infecciones oculares como la conjuntivitis, por lo que se recomienda acudir a piscinas seguras, limpias y con una adecuada recirculación de agua. Además, es muy importante escoger el calzado y ropa adecuados para esta época del año.

Con los cuidados debidos, los niños podrán disfrutar de un verano más seguro, sin sacrificar el esparcimiento y la diversión que tanto necesitan.

Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.

Comparte: