10

Dic

2025

Dictan una charla magistral sobre empleo y brecha laboral

El programa de Economía de la UDEP y la ONG Hacedoras organizaron un encuentro descentralizado en el que se analizaron las principales desigualdades en participación, liderazgo y condiciones laborales de las mujeres en el Perú.

Por Roxana Vásquez Palacios. 10 diciembre, 2025.

En alianza con la ONG “Hacedoras”, el programa académico de Economía de la Universidad de Piura llevó a cabo, en Piura, la charla magistral “Hacia un liderazgo femenino: cómo marcamos la diferencia”, a cargo de Mónica Muñoz, subdirectora ejecutiva de la Red de Estudios para el Desarrollo (Redes). La actividad incluyó el taller “Educación y efectividad del gasto público”, a cargo del doctor Germán Vega, profesor de la UDEP, y la ponencia “Desafíos y oportunidades de la mujer en la sociedad”, presentada por la doctora Brenda Silupú, profesora del área de Finanzas de la UDEP.

Durante su exposición, Muñoz presentó un análisis actualizado sobre la situación laboral de las mujeres en el Perú. Señaló que la brecha persiste: por cada sol que recibe un hombre, una mujer obtiene solo 76 céntimos. Indicó también que la participación femenina en el sector público aumentó en los últimos años gracias a la meritocracia y al mayor número de profesionales calificadas, lo que elevó su presencia de 42% a casi la mitad de los servidores estatales.

Pese a este avance, la distribución continúa desigual entre niveles de gobierno. En el ámbito local, la representación femenina alcanza apenas el 32.2%, mientras que en el nivel regional supera el 50% (59.0%). Aun así, solo dos mujeres ocupan actualmente una gobernación regional: Lima Región y Moquegua.

Retos de las mujeres en el sector laboral

La especialista explicó que sectores como salud, educación y servicios sociales concentran la mayor presencia de mujeres. En contraste, en seguridad, infraestructura, transporte y defensa —ámbitos históricamente masculinizados— la participación femenina es minoritaria. En 11 de los 17 sectores estatales, esta no supera el 40%, y en áreas como Interior, Defensa o Transporte, más del 70% del personal es masculino.

Muñoz abordó también el impacto de los “techos de cristal”, barreras invisibles que limitan el acceso de las mujeres a puestos directivos, pese a que cuentan con experiencia y calificaciones. Actualmente, solo 3 de cada 10 directivas públicas son mujeres. Estas limitaciones, indicó, refuerzan estereotipos como que “las mujeres no llegan porque no quieren” o que “el liderazgo es cosa de hombres”.

Otro desafío relevante es erradicar la desigual distribución del trabajo no remunerado. En 2024, las mujeres trabajaron en total 77 horas semanales, frente a 71 horas de los hombres, considerando empleo remunerado y tareas del hogar. Esta diferencia, que se mantiene casi sin variación desde 2010, afecta su bienestar y restringe su desarrollo profesional. Además, el 34% de mujeres reportó haber enfrentado alguna forma de acoso sexual laboral.

Muñoz afirmó que la igualdad de género es una condición esencial para el desarrollo económico. Recordó que las empresas con mayor equidad en sus directorios tienen 25% más probabilidad de obtener retornos superiores, según estudios internacionales.

Aportes desde la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales

La jornada contó con la participación de la doctora Brenda Silupú y del doctor Germán Vega, profesores de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la UDEP.

Brenda Silupú, jefa del Área de Finanzas, desarrolló la ponencia “Desafíos y oportunidades de la mujer en la sociedad. Explicó que, al segundo trimestre de 2025, las mujeres destinan 18.8 horas semanales al trabajo doméstico y de cuidado no remunerado, frente a 6.5 horas de los hombres. Indicó que los estereotipos y las normas de género restringen el avance de las mujeres y generan brechas en ingresos, acceso financiero, educación y empleo formal. Señaló también que la alta informalidad femenina refleja la necesidad de fortalecer políticas que aseguren su inserción laboral en condiciones adecuadas.

Por su parte, el doctor Germán Vega dirigió el taller práctico Educación y efectividad del gasto público, centrado en el diseño de políticas educativas. Explicó que la educación influye directamente en el bienestar: un trabajador con estudios universitarios gana más del doble que uno con secundaria. Sin embargo, la limitada cobertura de la educación superior provoca persistencia intergeneracional y reduce oportunidades. Analizó políticas recientes —como Beca 18, Jornada Escolar Completa, incentivos para docentes y la reforma universitaria— y destacó que los cambios institucionales deben acompañarse de intervenciones conductuales y respaldo político. La sesión concluyó con una dinámica en la que las participantes propusieron políticas que permitan que una niña nacida en un hogar de bajos ingresos acceda a un futuro económico estable.

 

 

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