Durante las Jornadas de Comunicación 2025, la egresada Lenka Miskulin explicó que la data impulsa la creatividad y que los comunicadores deben equilibrar estrategia, sensibilidad humana y medición para lograr mensajes eficaces y con propósito.
Por Aisa Serrano Caballero. 27 octubre, 2025.Lenka Miskulin, egresada de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Piura y actual CEO de OMD Perú, dirigió una conferencia y un workshop centrados en el papel de la data como catalizador de la creatividad. La líder de una de las agencias más importantes de Omnicom Media Group (OMG) explicó que la publicidad ha evolucionado desde la intuición hasta la inteligencia basada en datos.
Además, Miskulin planteó que la historia del marketing puede dividirse en tres grandes etapas: una enfocada en la producción; otra orientada a las ventas y una tercera centrada en el consumidor. En la actualidad, afirmó, se vive la era de la efectividad y la medición, donde “todo comunica y todo se mide”. La creatividad, añadió, ya no basta por sí sola, sino que debe demostrar resultados concretos y medibles, no solo en ventas, sino también en impacto y sostenibilidad de marca.
La experta explicó que uno de los principios fundamentales del marketing moderno es priorizar el retorno de inversión (ROI) a largo plazo, lo cual permite un crecimiento sostenido. Subrayó que la publicidad efectiva se logra al combinar estrategias de branding —que construyen reputación en el tiempo— con acciones de performance, orientadas a resultados inmediatos. “El performance tiene un límite, por eso el equilibrio entre ambos es clave para un crecimiento saludable”, indicó.
En el workshop, la egresada también profundizó en la metodología que permite convertir los datos en ideas que inspiran. A través del modelo Dato–Insight–Relato–Medición, mostró que una observación cuantitativa puede transformarse en un insight humano que dé lugar a una historia con impacto emocional y resultados medibles. “La data no reemplaza la creatividad; la inspira”, enfatizó.
Finalmente, invitó a los futuros comunicadores a desarrollar tanto competencias técnicas como habilidades humanas. Destacó que el pensamiento crítico, la empatía y la integridad son esenciales para pasar del modelo de los Mad Men al de los Better Men: que une data, creatividad y efectividad, para lo cual se requiere profesionales que usan la información con propósito y comunican con sentido.











