En la Semana de Derecho, el presidente del directorio de la Compañía de Minas Buenaventura, ingeniero Roque Benavides y académicos de UDEP dialogaron sobre minería, desarrollo y responsabilidad social en torno al Proyecto El Algarrobo.
Por Aisa Serrano Caballero. 19 septiembre, 2025.El conversatorio “Proyecto El Algarrobo: una oportunidad de desarrollo” contó también con la participación de los profesores de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, el doctor Guillermo Dulanto y el magíster Ernesto Gallo. El encuentro se presentó como un espacio de análisis interdisciplinario sobre los retos y oportunidades que plantea la minería en el Perú, así como sobre su relación con el desarrollo económico, social y ambiental de las comunidades.
En su exposición, el ingeniero Roque Benavides explicó los fundamentos del Proyecto El Algarrobo, concebido como una iniciativa privada dentro del marco de concesiones que otorga el Estado peruano. Señaló que la propuesta apuesta por la minería subterránea y descarta el modelo de tajo abierto, con el fin de reducir el impacto sobre la superficie y el entorno cercano.
El presidente de Buenaventura resaltó además el componente hídrico del plan, denominado Proyecto Hídrico Minero, que busca un uso eficiente del agua y la promoción de soluciones en beneficio de la población local. También afirmó que la minería puede coexistir con la agricultura, la pesca y otras actividades productivas, como la platería de Catacaos, lo que permitiría un desarrollo más integral.
Asimismo, insistió en la necesidad de avanzar desde la responsabilidad social empresarial hacia la responsabilidad social compartida, un concepto que involucra de manera activa a las empresas, al Estado, a la academia, a las universidades y a las comunidades.
Perspectiva económica y jurídica
El doctor Guillermo Dulanto recordó que la minería representa alrededor del 9 % del PBI y el 70 % de las exportaciones del Perú. Por ello, señaló que debe informarse el proyecto a la población, sus características. Como investigador recordó que todo proyecto minero debe analizarse en tres planos complementarios: el económico, que mide la rentabilidad, pero no decide; el legal, que garantiza el cumplimiento de las normas; y el político, que asegura la viabilidad social y el consenso con la población. En este sentido, subrayó que la articulación de estos factores constituye un requisito fundamental para garantizar la sostenibilidad de una iniciativa de gran envergadura como El Algarrobo.
Impacto en Piura y los agronegocios
El magíster Ernesto Gallo valoró el enfoque del proyecto, en particular su disposición a dialogar con las comunidades y atender sus necesidades. Consideró que el principio “agua primero, minería después” cobra especial relevancia en Piura, región donde el recurso hídrico tiene un papel determinante para la población y para las actividades productivas.
En su análisis, señaló que la minería, si respeta los estándares internacionales, puede aportar de manera significativa a la sociedad y convertirse en un motor de crecimiento para sectores estratégicos como los agronegocios.
A la actividad asistieron integrantes de la comunidad universitaria y también de la comunidad piurana. Puede acceder a la grabación en este enlace.
