La vacunación en la Universidad de Piura se realizó en el Policlínico Universitario y en la playa de estacionamiento del edificio de Derecho.
Por Betsy Salazar. 28 abril, 2021.La vacunación en la Universidad de Piura se realizó en el Policlínico Universitario y en la playa de estacionamiento del edificio de Derecho.
El sábado 24 y domingo 25 de abril, el campus de la Universidad de Piura fue uno de los centros de vacunación de los adultos mayores de 80 años. Fue el inicio del proceso de vacunación para personas de la tercera edad en la Región Piura, realizado por las autoridades de Salud; este continuará a medida que lleguen más vacunas. Asimismo, el miércoles 28, se convocó a los rezagados: quienes, habiendo estado registrados en el padrón, no pudieron vacunarse los dos primeros días.
En la UDEP, la vacunación se desarrolló bajo dos modalidades y en dos espacios: peatonal, en el Policlínico Universitario y ‘vacuna car’, en la playa de estacionamiento del edificio de Derecho; en este último caso, los adultos mayores no tuvieron que bajar del vehículo para ser inoculados.
Raul Olivares, gerente administrativo de esta casa de estudios, sostuvo que la universidad, al facilitar el uso de sus equipos e instalaciones, cumple con dos de sus objetivos: servicio a la sociedad y contribución a la solución de los problemas. “En esta oportunidad, estamos poniendo a disposición de las autoridades competentes de Salud nuestra cadena de frío y nuestras instalaciones para poder atender a los adultos mayores”, indicó.
De los equipos, destaca una ultracongeladora, con capacidad para albergar 80 000 dosis de vacunas; ideal para mantener refrigeradas cualquiera de las vacunas que hasta el momento se han desarrollado para prevenir el COVID-19; incluso las que requieren de un alto grado de refrigeración (hasta -70°C).
La vacunación
Para cumplir con los procedimientos, los adultos mayores presentaron su DNI y firmaron el formato de consentimiento informado. Luego de ello, el personal de Salud realizaba el triaje: toma de temperatura, medición de la saturación y preguntas referidas a la salud del adulto mayor, antes de vacunarlos. Luego de la vacunación, este quedaba en observación por 30 minutos, por si había alguna reacción adversa; de no ser así, la persona inoculada podía dejar el campus.
Durante el reposo de los vacunados, el padre Ricardo González, capellán mayor de la UDEP, les dirigió algunas palabras. Además, bendijo al personal de salud que estuvo trabajando en el proceso de vacunación y a los adultos mayores, beneficiarios de la primera dosis de la vacuna.
“Espero que este primer paso de vacunación sirva también para dar el otro paso: el de la atención espiritual, porque deben recordar que la persona no solo es cuerpo sino también alma y necesita de la salud espiritual”, dijo el padre González.
Algunos de los vacunados estaban acompañados (por una sola persona) por sus hijos, cónyuges o nietos, quienes se mostraron muy emocionados al ver a sus familiares recibir la vacuna. Valentina Silva (83), una de las beneficiadas, agradeció al Gobierno por esta campaña que están desarrollando ya que así se evitará más contagios.
Asimismo, exhortó a la ciudadanía de Piura a no salir de casa, sino es necesario, y a seguir cuidándose porque la situación en la ciudad en muy crítica y cada día mueren más personas.
