Premio Esteban Campodónico

2005 | Asociación de Damas de Ayuda al Instituto de Enfermedades Neoplásicas

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2005 | Asociación de Damas de Ayuda al Instituto de Enfermedades Neoplásicas (ADAINEN)

Esta asociación de damas voluntarias fue fundada en 1978 para realizar sus actividades en la misma sede del entonces Hospital de Neoplásicas, hoy Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas, INEN, que atiende a un promedio de 8 mil pacientes procedentes de todo el país, y en su gran mayoría de sectores muy pobres.

Se dedican a la recaudación de fondos, por ejemplo, una colecta nacional, destinados a costear tratamientos, conseguir medicinas y equipos médicos; así como a proporcionar ayuda moral, social y económica para los enfermos de cáncer de escasos recursos. ADAINEN tiene actualmente filiales en Cusco, Piura y Arequipa.

Discursos

Discurso de presentación del Doctor Carlos Vallejos Sologuren, Director del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas

Señoras y señores; muy distinguido auditorio:

Es un gran honor para mí dirigirme a ustedes para expresarles un cordial saludo en nombre del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas.

Esta es una oportunidad muy especial, de plena satisfacción y de orgullo para quienes trabajamos en uno de los más prestigiosos institutos especializados del país, en vista que hoy se hace un reconocimiento a aquellas personas que desinteresadamente entregan lo mejor de sus vidas a favor de miles de pacientes que padecen de cáncer. Me estoy refiriendo, por supuesto, a la Asociación de Damas de Ayuda del INEN – ADAINEN, que desde hace 25 años se ha constituido en un valioso aporte para nuestra gestión hospitalaria.

Para una persona que está a cargo de la conducción de una institución dedicada a proteger la salud y la vida de las personas, es muy gratificante trabajar sabiendo que se tiene al lado el invalorable apoyo de personas solidarias y generosas.

En ese sentido, considero que es un deber moral de muchos peruanos destacar y valorar la constancia y dedicación de este colectivo de generosas mujeres entregadas a una noble causa sin esperar nada a cambio.

A lo largo de mi trayectoria en el campo de la oncología en el país y en mis casi cuatro años de gestión como director general del INEN, he visto en muchos rostros de humildes niños y adultos afectados por el cáncer, dibujada una sonrisa de esperanza por la vida. Muchos no lo saben, pero esa sonrisa ha sido perfilada con el pincel del amor y la perseverancia de las integrantes de ADAINEN.

A través de sus gestiones logran abrir puertas de instituciones públicas y privadas, consiguiendo medicamentos para los pacientes de menores recursos económicos, así como también para adquirir nuestros equipos biomédicos de última generación con los cuales atendemos a nuestros pacientes sin distinción alguna.

Con pujanza y perseverancia han hecho posible que cada año conmemoremos una fiesta de solidaridad con las personas afectadas por el cáncer. Así, anualmente la población tiene grabada en su conciencia una fecha de colaboración con las colectas nacionales a favor de los pacientes INEN.

AADINEN es un colectivo de trabajo compuesto por inagotables damas voluntarias. El éxito de nuestras colectas nacionales se sustenta precisamente en el trabajo planificado de esta asociación, que tiene como soporte fundamental al espíritu solidario de cada una de las integrantes del voluntariado.

Por esta razón, considero pertinente hacer una mención especial a la notable labor de apoyo asistencial que cumplen las damas voluntarias del INEN; pues todos conocemos la dedicación y entrega desinteresada de tales “ángeles de la esperanza”, tal como las conocen nuestros pacientes. Nuestra gratitud es eterna para cada una de las distinguidas damas del voluntariado.

De ADAINEN tenemos que añadir: gracias sus gestiones muchos pacientes se benefician con la donación de fármacos para su tratamiento; además, brindan soporte hematológico en virtud de sus intensas campañas de donación de sangre en distintos puntos de la capital.

Asimismo, quiero agradecer el apoyo que nos están brindando en el proceso de descentralización de los servicios oncológicos, hecho que nos permitirá llevar la atención especializada contra el cáncer a los lugares más alejados del país.

Estimadas amigas, estimados amigos:

Una vez más me reafirmo en que en el Perú no todo es malo, no todo es desesperanza. No nos dejemos ganar por el desaliento. El trabajo que desarrolla ADAINEN es una muestra de que en nuestro país hay gente muy valiosa, con sólidos valores, trabajadores y, sobre todo, solidarios; hay peruanos que sabemos afrontar con valentía y optimismo los grandes retos que nos pone la vida diariamente.

Al momento de hacer este discurso, les confieso que las palabras que me vinieron a la mente fueron muchas que se relacionan con el amor al prójimo, la amistad y la dignidad, entre otros sentimientos.

Realmente, muy poco será el tiempo que dediquemos a elogiar el trabajo de ADAINEN; pues no solo los pacientes con cáncer se lo agradecen sino también los profesionales de la salud que trabajamos en este campo.

Esta tarde que tengo el placer y la gran responsabilidad de presentar a la Asociación de Damas de Ayuda del INEN. En ese marco, solo me queda añadir que gracias al trabajo conjunto estamos avanzando hacia la obtención de mayores recursos financieros que permitan brindar a los pacientes con cáncer una esperanza de vida.

Es por todo ello que felicito a la junta directiva de ADAINEN por haber recibido el máximo galardón en los Premios Esteban Campodónico Figallo, haciendo un especial reconocimiento a sus 26 años de existencia y de permanente apoyo a nuestro instituto.

Reitero nuestras felicitaciones para ADAINEN y las damas voluntarias de nuestro instituto, solo tengo palabras de eterna gratitud.

En nombre del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas ¡MUCHAS GRACIAS y FELICITACIONES POR EL GALARDÓN!

Doctor Carlos Vallejos Sologuren

Director del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas

Lima, viernes 19 de agosto de 2005

Discurso de agradecimiento de Rubby de Cotrina, presidenta de ADAINEN - Premio Esteban Campodónico Figallo 2005 en el Área de Servicios Directos a la Sociedad

Estimadas amigas y amigos:

Es para nosotras, que conformamos el grupo de ADAINEN, un alto honor que nos llena de orgullo y alegría, el recibir este año el premio Esteban Campodonico. El doctor Campodonico dio una muestra de altruismo al dejar parte de su fortuna para premiar a peruanos o instituciones que hayan realizados acciones en favor del país y de sus conciudadanos. Un sentido recuerdo y homenaje a su persona.

Asimismo, agradecemos al jurado, así como al Consejo Directivo de los Premios integrado por el doctor Ralph Coti, director de la Fundación Clover de Nueva York, el doctor Antonio Abruña, rector de la Universidad de Piura y el doctor Antonio Mabres, Prorrector, representantes de las entidades organizadoras de la convocatoria anual; al doctor Carlos Vallejos Sologuren, por su amplio respaldo en nuestra gestión.

Quisiera compartir esta premiación no solo en el nombre de ADAINEN, sino en nombre de muchísimas asociaciones y grupos que laboran silenciosamente en nuestra patria para conseguir el bienestar y mejorar la calidad de vida de nuestros hermanos, todas ellas son partícipes de este premio. Hoy nos tocó ser el símbolo del reconocimiento, cosas de la vida, pido a que Dios bendiga la labor que cada una viene realizando.

ADAINEN es una asociación benéfica sin fines de lucro fundada el 15 de octubre de 1978 gracias a la iniciativa de un grupo de esposas de médicos del Instituto de Enfermedades Neoplásicas, con la finalidad de brindar ayuda humanitaria a los pacientes adultos y adolescentes con cáncer, y de escasos recursos económicos, que llegan al instituto.

El Premio Esteban Campodonico Figallo representa para ADAINEN el reconocimiento al trabajo constante y a la entrega de amor de quienes, desde su fundación a la fecha, han servido en esta noble misión.

Quiero rendir un reconocimiento a nuestra primera presidenta de ADAINEN la señora Violeta de La Flor, aquí presente, y en nombre de ella a todas las presidentas y juntas directivas que nos antecedieron en este arduo camino, a las voluntarias que colaboran con nosotras y a todo el personal que trabaja en ADAINEN.

El cáncer, además de ser una enfermedad grave y angustiante, es una enfermedad muy costosa en su tratamiento. El Instituto de Enfermedades Neoplásicas brinda lo mejor del conocimiento y especialización de su cuerpo médico, pero gran parte del tratamiento es oneroso, y todos sabemos de los pobrísimos recursos económicos con que acuden los pacientes a nuestras instituciones. Es ahí donde ADAINEN realiza diversas actividades para la adquisición de fondos para la compra de fármacos y equipos para el tratamiento de estos pacientes.

Sabemos ahora que el cáncer ya no es más sinónimo de muerte, sino de lucha, de la aplicación de nuevos conceptos y técnicas en el tratamiento. Sabemos también que la prevención, el diagnóstico y tratamiento precoz son fundamentales para la curación de los pacientes, por esos conceptos ADAINEN colabora con la adquisición de equipos médicos de diagnóstico y tratamiento, acordes con la tecnología de punta.

El problema de los pacientes indigentes con cáncer en el Perú es un problema de salud en todo nuestro territorio, por ese motivo ADAINEN se ha proyectado a otras ciudades del país con filiales en Arequipa, Chiclayo, Trujillo, Piura y, próximamente, Cusco, contando en cada región con mujeres con espíritu de servicio y colaboración para sus pacientes con cáncer. A todas ellas nuestra felicitación y apoyo.

Para nosotras es un honor compartir este premio con las señoras Voluntarias del Hospital Víctor Larco Herrera, cuya ejemplar entrega de amor al paciente es una enseñanza constante.

El doctor Esteban Campodonico imaginó este programa y su generosidad la hizo realidad. Nos toca a nosotras con nuestro trabajo de amor realzar este galardón.

Quisiera concluir estas palabras, cortas, pero que sean como las semillas que caigan en terreno fértil y obtengamos frutos y podamos todos juntos sentir la alegría de dar, sentir paz en el corazón al colaborar con nuestros hermanos necesitados.

Gracias

Rubby de Cotrina

Presidenta de ADAINEN

Premio Esteban Campodonico Figallo 2005 Área de Servicios Directos a la Sociedad

Lima, viernes 19 de agosto de 2005

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