“Entre casado y cansado solo hay una letra de diferencia”

Por , publicado el 19 de diciembre de 2012

Entre cansado y casado no solo hay una letra de diferencia, me dirá alguno, y está en lo cierto. No es lo mismo casado que cansado; es más, hay cansados que no están casados y casados que no están cansados. Bromas aparte, quiero entrar de lleno en el asunto que me compete: hablar de la paronomasia.

Como sabemos, todas las palabras de una lengua mantienen distintas relaciones; así, por ejemplo, entre grande y enorme hay una relación de sinonimia, mientras que entre claro y oscuro hay antonimia, entre flor y margarita hay hiperonimia, mientras que entre clavel y rosa hay cohiponimia. Pero, ¿qué hay entre cansado y casado? ¿Mantienen algún tipo de relación como las anteriormente mencionadas? Desde luego que no. Entre cansado y casado hay paronomasia o paranomasia que es como también se le llama.

En las palabras parónimas hay una relación de semejanza en su pronunciación con diferencia de significado, tal como ocurre entre aptitud y actitud, entre adoptar y adaptar, efecto y afecto, absorber y absolver, abertura y apertura, perjuicio y prejuicio, entre otras. En el plano literario, se define a la paronomasia como una figura retórica que consiste en colocar dos palabras con sonidos similares pero de distinto significado, como en “Una pica lleva al hombro porque su suegra le dijo que ha de ganar por la pica lo que perdió por el pico”. Son parónimas pico y pica.

Las palabras parónimas suelen originar ciertos errores discursivos; así, es frecuente oír expresiones del tipo: “El agua de Miraflores es bastante salubre”, cuando en realidad se ha querido expresar que es bastante “salobre”, es decir, ‘salada’; o “La sequía nos causó grandes prejuicios” en vez de “grandes perjuicios”; o “Esos adolescentes infligieron la ley”, cuando lo que ha querido decir es que “infringieron la ley”, pues no es lo mismo infligir (‘causar daño’, ‘imponer un castigo’) que infringir (‘quebrantar leyes, órdenes, etc.’); pero sin duda alguna, en más dificultad estaría un “juez que absorbe de toda la culpa al reo”, en vez de “absuelve de toda la culpa”.

Como puede ver, estimado lector, más vale detenerse un minuto a pensar bien qué es lo que quiere decir, si complemento o cumplimiento de algo, si hay deferencia o diferencia entre algo, si se ha destornillado o desternillado de risa, si se ha desvelado o develado este fin de semana, si es un asunto patente o latente; pues, en vez de quedar como un prurito, podría quedar más bien como un brutito.

Para ir terminando y ya que se avecinan las fiestas navideñas, solo espero que estas no lo cojan cansado aunque usted esté casado, que se adapte al barullo de lo que se viene en los próximos días y, para ello, le sugiero que adopte una actitud positiva y que en casa, en efecto, esté rodeado de muchísimo afecto, pues más vale por estas fechas ser solidarios que estar solitarios.

Eliana Gonzales Cruz

3 comentarios

  • Ale dice:

    No me gustó la parte final. Hay quienes pasan la Navidad en soledad porque no tienen a nadie más y otros, porque así les gusta, porque Navidad no significa nada para ellos.
    Soledad no significa dejar de ser solidarios. Soledad no significa tristeza ni maldad.

  • Leslie dice:

    Que significa “entré casado y cansado sólo hay una letra de diferencia” parafrasear

  • Anghelo Purizaca dice:

    Increìble

Deja un comentario

×