Datación y algo más
Por Eliana Gonzales, publicado el 17 de diciembre de 2025
En estos tiempos que andamos contando los días para cerrar el año, es frecuente que surjan dudas sobre la correcta escritura de los numerales en las fechas y también en las horas.
Según se recoge en la Gramática y ortografía básicas de la lengua española (2024), contamos con tres modelos para expresar la fecha. El primero, el más usado de todos, es el que parte del día seguido del mes y cierra con el año: 15 de diciembre de 2025. El segundo, utilizado principalmente en Estados Unidos y en zonas de influencia anglosajona, coloca en primer lugar el mes, seguido del día y cierra también con el año: diciembre 15 de 2025. El tercer modelo, habitual en documentos internacionales de carácter científico y técnico, se escribe exclusivamente con cifras y coloca en primer lugar el año, seguido del mes y del día: 2025.12.15 (equivalente a 15 de diciembre de 2025).
Para los dos primeros modelos es posible emplear solo palabras, generalmente en textos legales o administrativos —como cheques, escrituras o actas— para evitar alteraciones: quince de diciembre de (o del) dos mil veinticinco. Sin embargo, también es frecuente la escritura combinada de palabras y cifras (Regresó el 12 de octubre de 2023) o el uso exclusivo de cifras. Para esta última forma, se pueden usar guiones (-), barras (/) o puntos (.), pero nunca comas, y los signos deben escribirse sin espacios en blanco: 12-10-2023; 12/10/2023; 12.10.2023. Asimismo, por razones de seguridad, puede anteponerse un cero a los números inferiores a diez, tanto para indicar el día como el mes, aunque en los usos ordinarios es preferible evitarlo. Además, es admisible escribir solo los dos últimos dígitos para indicar el año: 12.10.23. Existe, asimismo, la posibilidad de escribir en números romanos el mes (12-X-2023), aunque actualmente es poco frecuente.
Ahora bien, para expresar las horas, el español dispone solo de dos modelos. El primero divide las horas del día en dos periodos de doce horas cada uno: doce diurnas y doce nocturnas. En este sistema se utilizan los números del 1 al 12 o los cardinales correspondientes: uno, dos, tres, cuatro, etc. Para distinguir cada periodo se emplean las abreviaturas a. m. (del latín ante meridiem ‘antes del mediodía’ y p. m. (del latín post meridiem ‘después del mediodía’): 5 a. m. (cinco de la mañana o de la madrugada) y 5 p. m. (cinco de la tarde). ¿Y qué pasa con las 12? Si se refiere a las 12 del mediodía o de la mañana se usará solo la abreviatura m. (del latín meridies ‘mediodía’): 12 m.; pero para la medianoche se usará la forma 12 a. m.
Cuando la hora se escribe con palabras, es necesario precisar el momento del día: Se despertó a las diez de la mañana; Llegó a las tres de la tarde; Viajó a las nueve de la noche; Empezó a llorar a las dos de la madrugada. Ahora bien, si usamos fracciones horarias, se recurre a expresiones como en punto (las tres en punto), y cuarto (las cinco y cuarto), y media (las siete y media), y menos cuarto (las ocho menos cuarto), aunque en muchas zonas de Hispanoamérica preferimos cuarto para (un cuarto para las ocho). Este mismo esquema se mantiene cuando las fracciones se expresan en minutos: las tres y diez, las cinco y veinticinco, las ocho menos diez o diez para las ocho.
El segundo modelo corresponde a las veinticuatro horas, denominado así precisamente porque emplea los números del 0 al 24 o sus correspondientes cardinales: cero, una…, trece, catorce, etc.; y va acompañado del símbolo h —que no es una abreviatura y, por tanto, no lleva punto— para indicar la hora. Este modelo se prefiere cuando se busca expresar una mayor precisión: El avión aterrizó a las 14:27 h del jueves 25 de este mes. Para la medianoche se podrá usar tanto el número 0, que señala el inicio del día, como el número 24, que indica su final; así, las 24:00 h del 31 de diciembre es exactamente la misma hora que las 00:00 h del 1 de enero.
Finalmente, conviene precisar que, si se incluye la ciudad, esta deberá aparecer separada por una coma: Lima, 18 de diciembre de 2025 o En Lima, a 18 de diciembre de 2025. Lo mismo si colocamos día de la semana al inicio (jueves, 18 de diciembre de 2025); pero este uso variará si la fecha aparece como una estructura explicativa (El próximo martes, 30 de diciembre, tenemos el cierre de año) o como estructura especificativa (El cierre del año será el martes 30 de diciembre).
