En el campus, una serie de antenas, sensores y radares apuntan hacia el cielo con un propósito: recoger datos sobre el comportamiento del clima y los fenómenos que impactan en la vida de los habitantes del norte del Perú. Este equipamiento está en la Estación Científica Ramón Mugica Martínez (ECRMM). Por Fernanda Vegas Sernaque.

La ECRMM de la Universidad de Piura es una plataforma de observación científica que, desde hace más de tres décadas, permite observar en tiempo real los cambios atmosféricos y geofísicos de la región.

Su origen se remonta a la vocación pionera del profesor Ramón Mugica, quien en los años 70 inició en la universidad los primeros estudios locales sobre el Fenómeno El Niño (FEN). Años más tarde, el joven investigador Rodolfo Rodríguez asumió la continuidad de esas investigaciones, más aún tras el fallecimiento del doctor Mugica (1991).

 

Un radar perfilador de viento

El primer gran paso se dio en 1989, con la instalación de un radar perfilador de vientos, como parte de un proyecto binacional liderado por la National Oceanic and Atmospheric Administration – NOAA, la agencia estadounidense dedicada al estudio de los océanos y la atmósfera, a través de su Laboratorio Aeronómico instalado en Boulder, Colorado. El radar fue instalado tras el FEN de 1983, un evento extraordinario y catastrófico para la costa norte del Perú. En este proceso, el doctor Antonio Mabres, rector de 1989- 2003, impulsó y facilito la ejecución de las instalaciones y el desarrollo del proyecto, detalla Rodríguez.

“Por esos años, se sabía muy poco sobre estos fenómenos, por eso, los gobiernos de distintos países aumentaron la inversión para su estudio. El Laboratorio Aeronómico de NOAA planteó instalar una cadena de radares a lo largo del océano Pacífico Ecuatorial para observar la dinámica atmosférica ante el calentamiento oceánico, así se instaló este radar en la UDEP”.

Desde entonces, el doctor Rodríguez dirige la estación y ha liderado su crecimiento técnico y su proyección regional e internacional.

Hoy, la ECRMM cuenta, también, con un radar de lluvias de alta resolución —el primero del Perú—, una cadena de estaciones meteorológicas instalada entre la costa y sierra de Piura, un sistema para la medición de vientos en la mesosfera (SIMONe), cámaras de observación de nubosidad local, estaciones sísmicas y sensores de calidad del aire.

Estos equipos, además de recolectar datos, los traducen en conocimiento útil. En épocas normales y en tiempos alteración climática, la ECRMM se convierte en una referencia para entender cómo se comportan variables como la temperatura, las precipitaciones, el viento o la humedad. Por ejemplo, permite contrastarlas con las registradas en eventos pasados de El Niño, e incluso identificar señales tempranas de su posible ocurrencia.

Por su capacidad de observación continua, la ECRMM es clave para brindar información técnica a gobiernos locales, instituciones educativas, medios de comunicación y organismos internacionales interesados en comprender los impactos del fenómeno climático en el norte.

 

Una mirada al pasado

Desde la ECRMM, se puede detectar anomalías climáticas en tiempo real y explorar el clima del pasado. El 2000, se instaló el primer Laboratorio de Dendrocronología del país, especializado en el análisis de los anillos de crecimiento de los árboles. En este, los investigadores pueden reconstruir series climáticas pasadas, que ayudan a entender el comportamiento histórico del clima en la región. Así, los árboles se convierten en archivos que revelan la frecuencia, intensidad y duración de eventos como el Fenómeno El Niño a lo largo del tiempo.

Esta visión de largo plazo ha permitido desarrollar otros múltiples proyectos de investigación aplicada, como el monitoreo de la calidad del aire en ciudades de la costa norte —mediante sensores de bajo costo instalados en colaboración con la Universidad Cayetano Heredia—, o la caracterización de la Isla de Calor Urbana (ICU) de Piura, proyecto financiado por ProCiencia. Asimismo, a través de sistemas como el receptor VLF, la estación participa en una red global que estudia la actividad solar y su impacto en la atmósfera terrestre. 

Aunque la ECRMM nació en la Universidad de Piura y está ubicada dentro del campus, el trabajo realizado en ella trasciende los límites de la institución. Su labor ha servido de base para la formación de nuevas generaciones de investigadores, técnicos y estudiantes comprometidos con el estudio del clima y temas ambientales.

 

Aliados importantes

La instalación de la estación es el resultado del esfuerzo conjunto de instituciones aliadas, entre ellas, además de la NOAA, el Instituto Cooperativo para la Investigación del Medio Ambiente (Cires) de la Universidad de Colorado en Boulder y el Instituto Geofísico del Perú – IGP.

Rodríguez destaca, además, la participación de los doctores Ben Burton Balsley y Ronald Woodman, impulsores de la construcción del área del Radar dentro del campus. Ambos, doctores honoris causa por UDEP, gestionaron la instalación y operación del radar atmosférico para la medición de vientos de altura en la región Piura y los primeros estudios dendrocronológicos con especies arbóreas del bosque seco de esta parte del país, para encontrar el registro de los fenómenos de El Niño.